Allyson: Una mujer que escribe su propia historia

Allyson llega a las oficinas de Asociación PASMO en Honduras con la actitud positiva que la caracteriza, entre sonrisas y miradas llenas de convicción, relata las funciones que tiene en su actual trabajo como Sub directora de AFET (Asociación Feminista Trans) entre las que destaca la defensa de sus derechos como mujer trans y las alianzas con el comité educativo de la Universidad Pedagógica para hablar de su experiencia.  Si bien Allyson se desenvuelve con mucha soltura, ella nunca imaginó que su vida se desarrollaría de esta manera ya que en el transcurso de su infancia la situación era muy diferente.

Durante su niñez, Allyson se expresaba como mujer, le encantaba maquillarse y lo disfrutaba mucho. Sin embargo, enfrentó mucho rechazo por parte de su familia y compañeros de estudios debido a que su sexo asignado al nacer fue masculino. “El trato fue cruel por muchos años. Criticaban mi forma de ser y decían que era la vergüenza de la familia y eso me dolía en el alma. Yo llegaba maquillada y me obligaban a lavarme la cara. También estudié en un colegio militar dónde sufría mucho”.

Debido al rechazo de su familia, Allyson tenía 15 años cuando vivió en situación de calle y se vio forzada a dedicarse al trabajo sexual para poder sobrevivir. Diariamente Allyson se enfrentaba a muchos riesgos de adquirir infecciones de transmisión sexual como el VIH. Sin embargo, gracias al programa de prevención de VIH implementado por Asociación PASMO con el apoyo de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), ella conoció la importancia de realizarse una prueba de VIH periódicamente y también el uso del condón, como lo narra en sus propias palabras:

 

“Lo que nunca dejé de hacer en ese periodo de mi vida fue seguir capacitándome. Encontré organizaciones como PASMO donde aprendí a cuidar de mi salud y practicar la prevención haciéndome la prueba de VIH periódicamente y usando el condón. También identificaron que tenía capacidad y liderazgo y apoyé refiriendo a personas a la prueba.”

 

 

Después de su experiencia con PASMO, Allyson se unió al grupo Ilusión y Fantasía, el cual estaba integrado principalmente por hombres gay, mujeres trans y personas con VIH del municipio de Lima. También se unió al Colectivo Color Rosa en donde se capacitó en temas de acceso a la justicia. “Asociación PASMO ha contribuido a que Allysson Rodríguez sea la mujer que soy ahora. La mujer que conocieron antes, con todo este proceso de fortalecimiento y prevención, ahora es otra.”

Ahora como subdirectora de AFET (Asociación Feminista Trans), Allyson tiene un cargo que le ha permitido desarrollar su liderazgo y luchar por los derechos de las mujeres trans, sintiéndose segura de sus habilidades y de su valor como persona. También como parte del autocuidado que ella pone en práctica, ahora es usuaria de los servicios de profilaxis preexposición (o PrEP, por sus siglas en inglés) recientemente lanzados por PASMO en Honduras como parte de la oferta de servicios de prevención para el VIH bajo el proyecto de USAID “Servicios de Prevención en VIH” en Centroamérica.

“Mi familia ahora dice sentirse orgullosa de mi porque he librado muchas batallas especialmente el Estigma y la Discriminación.”

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