Un ‘espacio libre’ para ser tu mismo: La historia de Carla y su hijo, Alejandro
En 2022, Asociación PASMO conoció a Alejandro, un joven trans y su madre, Carla en una actividad coordinada con Asociación SOMOS para el abordaje comunitario en la reducción del estigma y la discriminación. La actividad, diseñada por PASMO y ejecutada en Centroamérica de la mano de ONG socias, se llama “Espacios Libres” y busca crear espacios seguros de discusión, aprendizaje y transformación comunitaria en pro de la inclusión social de personas de la diversidad sexual, personas viviendo con VIH y otras poblaciones vulnerables.
Carla, madre, educadora y lideresa comunitaria, con su sonrisa amplia y cálida, afirma “Yo haría cualquier cosa por mi hijo hasta que pierda mis fuerzas”. Ella se enteró de los “Espacios Libres” a través de su rol como enlace comunitario en la Municipalidad de San Miguel Petapa, un municipio al sur de la Ciudad de Guatemala. Relata cómo hace algunos años su hijo inició un proceso de transición como hombre transgénero y, a pesar de su desconocimiento sobre el tema, ella no se sentía sorprendida ya que ella notaba ciertos comportamientos en Alejandro que le daban indicios de su verdadera identidad. 
Por su parte, Alejandro con una voz grave y llena de orgullo cuenta como ha sido salir del clóset como hombre trans y cuáles son los obstáculos que ha enfrentado, “La mayoría de las personas nos llama mujeres tomboys o mujeres lesbianas. Por la falta de información no entienden quiénes somos realmente” expresa.
Alejandro siempre se sintió diferente a las otras niñas porque prefería pasar tiempo con los niños y jugar fútbol. Él recuerda cómo fue discriminado cuando asistía a la escuela “Las personas se reían de mi por ser una niña masculina con cabello corto.” Ante el poco acceso a educación sexual integral e información. Alejandro se dedicó a investigar por su propia cuenta más sobre temas de sexualidad e identidad de género en donde aprendió sobre las personas transgénero. “Mi cuerpo siempre ha sido mío, pero no estaba completo”, describe Alejandro. Afortunadamente contaba con su madre Carla, una mujer amorosa y luchadora a quién él considera como un ejemplo a seguir.
Carla relata el acompañamiento que le dio a su hijo quien pasó momentos muy difíciles. Para mostrarle su apoyo y su amor incondicional, ella decidió llevarlo a comprar ropa masculina que le permitiera sentirse él mismo. “Yo no perdí una hija, yo gané un hijo feliz y seguro con su nueva identidad”, recuerda con mucha emoción.
Después de haberse aceptado a sí mismo y contar con el apoyo de su madre Alejandro sabía que había una comunidad a la que podía pertenecer y contribuir de manera positiva. Por ello decidió iniciar con sus amigos el “Colectivo Metamorfosis” en su comunidad, dedicado a ayudar a otros hombres trans a entender su identidad, acompañarlos en su transición y luchar por sus derechos.
Al participar con su madre Carla en los “Espacios Libres”, Alejandro se sintió feliz de encontrar un lugar seguro donde él podría contar su historia y hablar de su identidad con otras personas. Carla también aprendió muchas cosas, pero lo más importante para ella fue tener la oportunidad de hablar abiertamente con su hijo, incluso más que antes y pudieron entender como la otra persona vivió la historia. Su relación y la de su familia se ha fortalecido y empoderado a través de estas acciones “Escuchar, ayudar y apoyar son las cosas más importantes que una madre o un padre debe hacer por sus hijos. Y yo quiero que mi hijo llegue lejos”.
Alejandro y Carla encontraron un ‘espacio libre’ para aprender y crecer juntos por una familia, comunidad y sociedad más incluyente, todo como parte del proyecto de USAID “Servicios de Prevención en VIH” implementado por Asociación PASMO en Centroamérica.
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